INQUINA
ESCRITA Y
DIRIGIDA POR DIEGO SOTO DIAZ
ESCENOGRAFIA
JORGE VIGNOLES
SALA VERDI
En un
horario bastante inusual ( Martes Miercoles y Jueves a las 20 y 22 hs) se
presentó esta obra , que nos coloca frente a un conflicto padre-hijo y a sus raíces
en el pasado.
El padre es
un militar retirado que ha sufrido un infarto y está internado en terapia
intensiva de un Hospital. El hijo es un rico abogado radicado en España que ha
venido en una escapada de3un par de días para visitarlo.
En las primeras
escenas llama la atención el contraste entre el padre, de costumbres más bien
modesta, con el hijo que tiene todos los aires de un hombre de negocios moderno
: se queja por ejemplo de que su secretaria lo ha ubicado en la clase turista
del avión junto a un conjunto de gente desagradable , incómodo además ,
quejándose de que las cias aéreas no brinden un servicio como el que tienen que
brindar y cobrando lo que tienen que cobrar, para permitir que viaje toda esta gente que no tiene el dinero
suficiente para hacerlo, cuando se les debería enseñar que si no pueden , que
no viajen.
Con el
progreso de la acción vamos descubriendo cosas de la vida pasada del padre, que
fue un militar muy metido en las actividades de la dictadura y en el
interrogatorio de prisioneros y cuya casa era frecuentada por otros
participantes, que tenían tendencia a consumir alcohol y festejar las
actividades desarrolladas. Fue en esas circunstancias que el padre sometió
sexualmente a la empleada doméstica de su casa que tuvo un hijo suyo, episodio
que tuvo mucho que ver con el posterior
suicidio de la esposa, madre del abogado.
No es una
obra demasiado original ni tampoco aporta un enfoque que agregue nada a lo
mucho que se ha dicho sobre el tema. Pero está bien construìda, los diálogos
son creíbles y los tres intérpretes principales tienen actuaciones impecables,
en particular YAMANDU BARRIOS BROCHADO y ADRIANA DA SIILVA respectivamente como el hijo y la ex empleada
de la casa. FERNANDO AMARAL se ve muy
perjudicado por la ubicación en el escenario, que dificulta la visión de su
rostro y hasta escuchar sus parlamentos. Es que la puesta padece de dos serios
problemas .Uno es la iluminación constantemente en penumbras que impide ver
bien los rostros de los actores, al punto que recién cuando salen a saludar se
tiene una idea acabada de sus apariencia. Y otro es el sonido ( se ha optado
por la amplificación de las voces ) que está colocado muy bajo y que permite oír
a los intérpretes y entender lo que dicen
sólo el 60% del tiempo.
La puesta
juega con la inclusión de escenas filmadas, que en general no son demasiado
claras narrativamente y poco contribuyen al desarrollo de la acción.
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