sábado, 18 de abril de 2020

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APRENDIENDO A VIVR ( SCAFFOLDING )
DE MATAN YAIR SOBRE GUION PROPIO
ISRAEL/POLONIA 2018
MEJOR FILM,DIRECTOR, GUION, ACTOR SECUNDARIO (AMI SMOLARTCHIK ) PARA LA ACADEMIA ISRAELI DE ARTE CINEMATOGRAFICA
MEJOR FILM ISRAELI Y MEJOR ACTOR EN EL FESTIVAL DE CINE DE JERUSALEM
MEJOR OPERA PRIMA EN EL FESTIVAL DE FILADELFIA
MEJOR FILM Y MEJOR DIRECTOR EN EL FESTIVAL DE CINE JUDIO DE VARSOVIA
OTROS PREMIOS Y NOMINACIONES
NO ESTRENADA EN LATINOAMERICA


Es un curioso film autobiográfico. El autor y director, que hace las veces de actor también ( y esto crea una contradicción porque es visiblemente muy mayor que los 17 años  del personaje y eso obliga a que todos los actores que interpetan a sus colegas de clase lo sean también )
Hijo de una pareja desavenida, le ha tocado en suerte ser criado por su padre, quien lo tratado siempre de una manera más bien rígida, donde el afecto-que existe- no sale a luz más que en contadísimos momentos. Hay una contradicción total entre el futuro que el padre ha decidido para él como  heredero de su empresa de construcción y alquiler de  andamios para edificios ( los scaffolds del título original ) no ve con buenos ojos que robe mucho tiempo de su trabajo a los estudios y reacciona mal cada vez que lo ve  sentado con un libro en lugar de estar trabajando con los obreros.
El por el contrario tiene una inclinación cultural que ha sido estimulada por su profesor de literatura  que es el único que ha conseguido detectar detrás de su rebeldía constante y por momentos intolerable contra todo y contra todos, y su tendencia a embarcarse en constantes peleas violentas, una sensib8ilidad y un interés por el arte.
El film ha provocado una división entre un sector de los críticos y del  público que lo han ensalzado con entusiasmo y otro sector mas reticente , dentro del cual me encuentro, que le señala al film su carácter inconexo, fragmentado como el propio protagonista, el final inconclusivo y  la poco creíble relación del protagonista con las autoridades de su Colegio que le aceptan demasiados actos de grave indisciplina sin expulsarlo. Esto último quizás es magnificado por la edad del actor que es claramente un hombre hecho y derecho si bien joven, haciendo más intolerante la conducta que si partiera de un frágil adolescente de 17 años.










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