EL JARDIN DE LOS CEREZOS, DE ANTON CHEJOV – DIR.Y
ADAPTACION DE HELENA TRITEK
ESCENOGRAFIA VESTUARIO Y PROYECCIONES : EUGENIO
ZANETTI
TEATRO MUNICIPAL GENERAL SAN MARTIN
En primer lugar corresponde felicitar al público de
Buenos Aires, que es quien posibilita y da sentido a este tipo de emprendimientos,
capaz de colmar como hoy la sala mayor del TMGSM un Miércoles as la noche sin
que medien descuentos extraordinarios, si bien con el precio moderado que
practican los Teatros Oficiales menos el Colon, y hacerlo para ver un clásico
teatral que se presenta sin recursos extra teatrales, salvo la presencia de
algunos grandes actores en el reparto, es una elocuente muestra de inquietud
por el espectáculo teatral, la misma que está dando aliento tanto al Teatro Comercial
que ha afinado su calidad y al sin numero de pequeñas salas del off.. Da gusto
que sea así
HELENA TRITEK
en su doble papel de adaptadora y directora realizó una magnífica tarea,
acercando el magnifico texto de Chejov al público moderno, sin violentar su esencia y por el
contrario destacándola.
Es obvio que no se reduce impunemente el texto a 1,40
hs. de duración incluyendo en ella algunos momentos musicales, pero sabido es
que el público actual habituado al ritmo de la tv no soportaría fácilmente un
montaje integral y al ritmo de de Chejov ( ni pensar Shakespeare cuyas obras
duran si presentadas integralmente en torno de las 4 horas)
El gran logro es haber conseguido hacerlo y que la
obra no sufra más de lo necesario, conserve su esencia.
EL JARDIN DE LOS CEREZOS es una joya de la literatura teatral de todos
los tiempos , un texto magnífico, soberbio no sólo por el fino trazado sicológico
de todos y cada uno de los personajes, que origina una fuerte exigencia a la
hora de elegir los actores del reparto, porque cada personaje cuenta, sino además
y ante todo un retrato nostálgico, emotivo y lúcido a la vresz del fin de una
era. La vieja aristocracia rural de Rusia integrada por personas que viven de
espaldas a los problemas económicos , que no los tienen en realidad ya que la
renta de las plantaciones cuidadas por los siervos cubre ampliamente sus
necesidades incluídas sus extravagancias, cede el paso a la burguesía más
conectada con la realidad, que vive más con los pies en la tierra que con la
cabeza en las nubes.
El retrato de los dos hermanos Liuba y Gaiev es a la
vez tierno y cruel. El no sirve literalmente para nada, es romántico que vive
de hacer discursos bonitos a propósito de nada y soñar jugadas de billar,
incapaz de mover un dedo hacer algo para
detener el derrumbe de la casa y el remate de la propiedad. Ella vive con la
cabeza en otro lado, mitad del tiempo en
París donde está su amante que la ha arruinado y ahora se apresta a continuar
su trabajo cuando ella retorne con lo que sobró del derrumbe y mitad en el
pasado en los recuerdos tiernos de la infancia o el dolor de la muerte
accidental de su único hijo.
Tritek ha obtenido de sus colaboradores una puesta
bellísima que se inicia excelentemente con una apelación al pasado reciente con
un baile a todo trapo en la gran mansión cuando era lo que era, y va luego
dando los climas con algunos elementos escenográficos, mucho espacio y telones
trasparentes sobre los que se proyectan imágenes de gran belleza, como el
cerezo que claudica al final.
_El elenco es excelente en todos los papeles con dos
trabajos notables de MARIOALARCON y
CRISTINA BANEGAS ambos actores
con una ejemplar trayectoria que dan todo de sí mismos para obtener dos
creaciones magistrales dignas de ser aplaudidas de pie.
Habría que mencionar uno por uno a todos los integrantes
del elenco, pero voy a detenerme sólo a
mencionar los dos extremos en materia de edad de los actores que lo integran,.
Tritek alteró el texto de Chejov para darle lugar a la
actriz NELLY PRINCE en un justo homenaje
a su trayectoria y ella responde con un excelente trabajo especialmente en las
contraescenas, siempre pendiente de las necesidades de su amo ya que ella se ha
negado a aceptar la liberación. Es verdad que la conversión en mujer del viejo
Firtz en algunos momentos no es del todo natural porque es el valet de cámara
de Gaiev y debe necesariamente ser un hombre, pero vale la pena hacer oídos
sordos a estas pequeñas contradicciones con tal de ver a esta actriz singular
en escena.
En la otra punta está el convincente trabajo de ESTE
AN MELONI no porque sea mejor o más importante que el de sus colegas sino que
es la ratificación de una vocación por el teatro de calidad que ha venido
evidenciando este joven actor cuya presencia física le daría pie para una
explotación más mercantilista y televisiva de su figura.
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