miércoles, 21 de septiembre de 2011

UR-ARTIGAS-LA REDOTA

ARTIGAS, LA REDOTA de CESAR CHARLONE


Por muy poco no logra ser un gran filme y un excepcional documento
Consigue ser una excelente creación cinematografica pero incurre en un grave traspie que lo descalifica como documento.
Parte de una excelEnte doble idea arguemntal :
Por un lado, en tiempo presente, tenemos la odisea del pintor Blanes contratado por el Presidente Santos para pintar un cuadro de Artigas, trancado en su labor al no contar para ello con imagen alguna del caudillo y solo contextos que hablan de su gesta, y al que emndefinitiva se le ordena que use su imaginación para lograr el retrato. Un  retrato que sera vetado por el Presidente que vera con desagrado las figuras de las personas que lo acompañan en el cuadro, reflejo del campensinado de la epoca que fue fiel a su liderazgo.Con una clara predominancia de las teces escuras y el rostro curtido del habitante pobre de la campiña. Un retrato que en definitiva precisara del pincel corrector que elimine el entorno y deje al personaje ya solemnizado y convertido en heroe al frente de un edificio, tal como hoy lo conocemos.
Por otro, en tiempos pasados sigue la peripecia de un soldado de inteligencia britanico, contratado para espiar a las tropas bonaerenses  durante la guerra de independencia, que es capturado , torturado y amenazado de muerte por el Gobierno de la Provnica de Buenos Aires, quien le ofrece perdonarle la vida a cambio de llevar adelante una mision de riesgo : viajar a la Banda Oriental infiltrarse en el campamento artiguista y eliminar  a este caudillo que tanto revuelo y desorden esta provocando en la campiña, y que amenaza extender su influencia disolvente a las provincias vecinas. Es deslumbrante el retrato que el film hace en primer lugar del estilo de vida en Buenos Aires con el Palacio Gubernamental y el desordenado universo que lo habita donde conviven autoridades, soldados, sirvientas, cerdos, pollos y patos. Y la horca en plena plaza publica. Pero mas aun lo es el retrato de la campiña oriental , un paramo desierto sin caminos , con rios y arroyos que hay que atravesar vadeandolos y una soledad de vez en cuando interrumpida por el esqueleto de algun vacuno que ha sido carneado y consumido con abandonando negligentemente  los restos en el lugar. Esta descripción se hace mas impresionante cuando llegamos al campamento de la REdota, con esa abigarrada acumulación de mujeres y niños, pobres, mal vestidos pero no hambrientos , viviendo en tolderias, y la precaria forma de preparar los alimentos, con los animales diendo carenados a la vista en pleno suelo. Artigas se ve poco y habla poco. Es mas una presencia simbolica poco vista, poco presente, que mantiene viva la llama de la libertad concebida no solo como libertad frente al opresor politico sino tambien en relacion a los medios de vida.
Y la vuelta de tuerca final cuando el gobierno de Buenos Aires comprende que no le queda otra opcion si ha de desterrar a los españoles de Montevideo que volver a aceptar en el seno del pergonado pero tracionado federalismo al lider rebelde.
Y alli sobre el final es donde viene el traspie porque Artigas pronuncia un discurso demasiado contemporaneo, que deja visible la intencion de engancharlo en alguna ideología mas actual y codefendido jamas y que es mas es harto imporobable que haya dicho por pertenecer a un universo cultural que no es propio de la epoca.
Bien actuado pero sobretodo magníficamente fotografiado, es mas valioso como creación cinematografica que como estudio historico, donde es en gran medida objetable.VALE LA PENA VERLA.


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