EL SECRETO DE ADALINA ( ADALINA ) DE LEE TOLAND KRIEGER –GUION MILLS GOODIOE
Y SALVADOR PASkOWITZ-
Desperdicia una idea original que pudo ser
interesante en construír un dramón romántico con un final absolutamente cantado
que no voy a revelar para darle al espectador el gusto descubrirlo por si mismo
a los pocos minutos de iniciado el film.
La protagonista sufrió un accidente en su juventud
que ha alterado el funcionamiento de su cuerpo que simplemente carece de la
función “ envejecimiento “ y por ende permanece inmutable a lo largo de los
años, mientras todo el mundo a su alrededor ( comenzando por su hija )
envejece.
Con el deseo de no convertirse en un espécimen de
laboratorio ha pasado a seguir una rutina por la cual cada 10 años se muda de
ciudad y cambia de nombre, de modo que quienes la conocen pierdan contacto con
ella y no reparen en el hecho de que no envejece.
Ha cambiado de nombre ya 6 veces a lo largo de su
vida y sólo mantiene como una constante su relación con su hija, que es hoy una
señora entrando en la vejez y que sólo cuando están solas puede llamarla “ mamá
“
Este estilo de vida forzado por las circunstancias
preclude la posibilidad de formar una familia, tener una pareja, enamorarse y
éste precisamente será el problema que enfrente a lo largo del film, cuando se
enamora de un joven que la corteja..
Tiene una magnífica ambientación y la protagonista
está vestida con gran elegancia realzando la belleza natural de la expresiva y
bellísima LAKE LIVELY como la protagonista.
Pero el film se lo roba ELLEN BURSTYN
como su hija octogenaria.
Se puede ver, si no hay otra cosa más interesante
para hacer.
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